YO DECIDO
Yo decido gastar o ahorrar; reír o llorar; hablar o callar.
Yo decido ser feliz o infeliz; estar triste o alegre; quieto o activo. Nadie decide por mí.
Yo decido estar adelantado o atrasado; limpio o sucio; intranquilo o en paz.
Si me desvelé o me acosté temprano, fue decisión mía, de nadie más.
Yo decido creer y rezar; confiar y actuar; ganar o perder.
Nadie decide por mí; es mi decisión.
Yo decido trabajar o descansar, criticar o alabar, fracasar o triunfar.
Yo decido progresar o quedar atrás, crecer o disminuir, elevarme o hundirme.
Fuera excusas, fuera pretextos; nadie decide por mí, nadie piensa por mí.
Yo decido cambiar o seguir igual, es mi decisión, mía y de nadie más.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.