ESTRÉS
Cien por ciento de estrés nos daña; cero estrés, también nos daña.
Cincuenta grados de estrés nos pueden resultar favorables, necesarios para la salud.
Formas de cortar el círculo del estrés: Ejercicios de gimnasia, ejercicios de respiración profunda, caminar, correr, nadar; el contar chistes y reírte a carcajadas.
Se puede estimular el sistema inmunológico con dieta basada en alimentos naturales, y carente de grasas y carnes de productos animales, hasta dónde te sea posible.
Una dieta natural favorece el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
El ejercicio físico favorece el buen funcionamiento del sistema inmunológico: Ejercicios aeróbicos (que abundan en aire, en oxígeno); también usando tejidos naturales en la ropa que llevamos puesta: algodón, seda, lana.
Oír música, ver paisajes contribuye a la estimulación positiva del sistema inmunológico.
Las emociones positivas: amor, alegría, optimismo, confianza, paz, entusiasmo, etc., son factores benéficos para el sistema inmunológico.
Las emociones contrarias al amor, alegría y paz, afectan al sistema inmunológico, y en consecuencia, afectan nuestra salud.
Los frutos del espíritu: amor, alegría y paz, mejoran el sistema inmunológico, y en consecuencia, propician un mejor estado de salud.
El sistema inmunológico se lesiona con enojos, pleitos, rencores, resentimientos, pensamientos negativos, desveladas, cigarrillos, no ejercicio, falta de sueño, no respiraciones profundas, alcoholismo, drogas.
(Luis Jorge González, sacerdote Carmelita Descalzo).
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.
