LA PACIENCIA ES AMARGA, PERO SU FRUTO ES DULCE
La paciencia es la virtud que lleva al ser humano a soportar contratiempos y dificultades para conseguir algún bien.
Lo contrario a la paciencia es la exasperación, el arrebato, la ansiedad, la impaciencia.
La paciencia es la constancia valerosa que se opone al mal; que busca el bien
a pesar de los sufrimientos.
La paciencia es la virtud de quienes saben sufrir y tolerar (con fortaleza y sin lamentaciones)
los problemas y adversidades.
Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa. Dios no se muda. La paciencia todo lo alcanza. Quien a Dios tiene nada le falta, solo Dios basta.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.