SERENIDAD INTERIOR
No hace falta ser millonario para comprobar que la serenidad interior va muy de la mano de la felicidad, y aquélla no se alcanza si no simplificamos un poco nuestra vida.
Se ha vendido una imagen de éxito que no corresponde con la serenidad interior.
Si queremos ser más felices tendremos que simplificar nuestra vida para disponer de tiempo para nosotros mismos y para saborear momentos, situaciones y experiencias.
"Velen, pues, porque no saben en qué día va a venir su Señor" Mateo 24, 42.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.