"Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen". Lucas 23, 34.
LA VOZ DE MI TRABAJO
Dices que me quieres, pero en ocasiones no me lo demuestras. Al principio todo era distinto. Te quejas demasiado. Me tratas como si no te importara. Gracias a mí tienes dinero para cubrir tus necesidades. No te has dado cuenta que conmigo te realizas y adquieres importancia. Yo te doy mucho más que dinero, pero no lo valoras. Cuando ya no me tengas sabrás lo importante que fui. Entonces, será demasiado tarde. Si no fuera por mí tu vida sería muy distinta. Tú me buscaste a mí. Si no me cuidas ahora, lo lamentarás más tarde.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.