"Mis ovejas escuchan mi voz, dice el Señor, yo las conozco y ellas me siguen". Juan 10, 27.
Eran cien ovejas que había en el rebaño. Eran cien ovejas que el pastor cuidó.
Pero en una tarde, al contarlas todas, le faltaba una y triste lloró.
Las noventa y nueve dejó en el aprisco, y por la montaña a buscarla fue. La encontró gimiendo, temblando de frío.
La tomó en sus brazos, curó sus heridas, y al redil volvió.
El Señor es mi Pastor, nada me faltará.
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martes, 19 de enero de 2021
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