LA ELOCUENCIA DEL EJEMPLO
(Extracto de la reflexión dominical del padre Rogelio Narváez Martínez)
¿Quién puede olvidar a San Francisco de Asís, acompañado del hermano León, y predicando elocuentemente con el silencio?
Solamente han caminado sumergidos en el sigilo por las calles de un pueblo.
Y al regresar al convento el hermano León le recuerda que habían salido del Convento a predicar.
Francisco le contesta:
"Ya lo hemos hecho, hermano León".
San Francisco sabe que el testimonio es uno de los mejores vehículos para la predicación.
Se trata de la voz más convincente, persuasiva y expedita con la que cuenta la Palabra.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.