EDUCACIÓN
La naturaleza da, pero no basta, hay que cultivar al ser humano.
Que el niño aprenda, que opine, que imagine, que proponga, que dialogue, que trascienda. El ser humano necesita acciones que unan cuerpo y alma para dar fruto: virtudes que lleven a la felicidad. El ser humano habrá de producir fruto. No bastan los ojos para ver, hay que saber ver. No bastan los oídos para oír, hay que saber oír. No basta el cerebro para pensar, hay que saber pensar. No basta leer, sino dialogar sobre lo leído; aprender a dar una opinión. No todo clima favorece a los naranjos; no todo ambiente favorece al ser humano. Si al Estado, si a las Instituciones, si a la Familia, si a la Escuela, si a la Iglesia no le interesa lo que siente el ser humano, estamos huérfanos. ¿Quién podrá interesarse en el ser humano?
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.