"En verdad, en verdad les digo que si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no tendrán vida en ustedes. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día". Juan 6, 53-54.
SOY LIBRE, YO DECIDO
Tengo el poder del libre albedrío, Yo decido cómo reaccionar ante un insulto y una mala cara; ante una ofensa y un mal conductor; ante un aumento de impuestos y un mal servidor público. Hay que ser felices; ello no significa negar la realidad.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.