Pablo Sarasate, quien ha sido considerado el mejor violinista español de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, afirmaba que en uno de sus conciertos una buena mujer le grita un excelente cumplido después de una magistral interpretación:
"Sarasate eres un genio". A lo que él le respondió: "Me llamas ¡Genio!, ¿a mí?, sí todos los días tengo que ensayar 11 horas".
Lo mismo se cuenta de Fritz Kreisler, otro gran violinista de fama mundial, al cual se le acercó una dama entusiasta de la música y le dijo:
"Señor Kriesler, ¡Yo daría mi vida por tocar como usted!". A lo que contestó con calma el violinista: "Señora, eso es exactamente lo que yo he hecho, he dado mi vida".
Reflexión:
Perseverancia y entrega se convertirán en dos virtudes que pueden transformar nuestra vida. Perseverancia y entrega, Cantidad y Calidad.
La perseverancia suele ser la Cantidad, y la entrega es la Calidad en el esfuerzo que efectuamos. Perseverancia y entrega, unida a la ayuda de Dios.
La perseverancia es una gran virtud que nos llevará al éxito. La perseverancia todo lo alcanza. Jamás fracasaremos si somos perseverantes.
Debemos insistir, persistir y volver a insistir. Nunca hay que desfallecer. Dios premiará nuestro esfuerzo. La perseverancia es la clave del éxito. Si soy perseverante, jamás fracasaré.
Máxima:
Perseverancia es la gota de agua que logra perforar una piedra.
Que Dios y María Santísima te bendigan. Mary y Jaime.