Lo opuesto a las emociones negativas que nos enferman, es lo que San Pablo llama frutos del espíritu:
amor, alegría paz, autocontrol, bondad, esperanza, etc. Con ello incrementarás la salud.
La alegría es la expresión más directa de un estado de salud completo.
Visualízate alegre, feliz, en estado óptimo.
Dios me quiere feliz y que anuncie felicidad a los demás.
(Luis Jorge González, sacerdote Carmelita Descalzo)
Que Dios y María Santísima te bendigan.
Mary y Jaime.