jueves, 11 de agosto de 2011

EFICACIA DE LA ORACIÒN.

Pidan, y se les dará; busquen y hallarán; llamen, y se les abrirá. Porque todo el que pide recibe, y el que busca, halla, y al que llama se le abre. ¿O quién hay de ustedes, al que su hijo le pide pan, y él le dé una piedra? O si le pide un pez, ¿le dará una serpiente?

Si, pues, ustedes, que son malos, saben dar a sus hijos cosas buenas; ¡Cuánto más su Padre, que está en los cielos, dará cosas buenas a quien se las pida! San Mateo VII, 7-11.

Dios siempre escucha nuestra oración y lo que Él nos da supera en mucho todo aquello que nosotros le estamos pidiendo.

Cuando las cosas no han salido como las pedimos, recordemos  que Dios tendrá siempre un proyecto mejor.

Dios jamás se equivoca. ¡Dios sabe lo que es mejor para nosotros y Él nunca se equivoca! Nosotros esperábamos que Dios actuara así... ¡Pero resulta que las cosas se han desarrollado de una forma que no entendemos!

Pidamos con FE, y tengamos la seguridad de que Dios nos dará siempre lo mejor.

Que Dios y María Santísima te bendigan.          Mary y Jaime.

Entradas populares